De ella... que era increíblemente buena, inteligente y alegre.
También que la amaba demasiado y que jamas se lo dije...
Tantas palabras que callamos y que después nos reprochamos.
Y hoy les hablo de ella porque he tenido el peor de los sueños, de algún modo lograba encontrar una manera de escuchar su voz y me quedaba ahí...
aferrándome a lo único que me quedaba de ella,hecha pedazos y con un millón de lágrimas.
Fue entonces cuando al fin, después de mucho tiempo, supe que ella ya no estaba y que jamás lo estaría.
Pero al igual que a mis demás aves, siempre la extrañaría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario